‘Tener’ o ‘mantener’ un sitio web
Realizar una inversión en el sitio para posteriormente no llevar a cabo labores de actualización es similar a construir un comercio físico y olvidarse de mantenerlo limpio y seguro, reponer el producto o cambiar el escaparate. A continuación te mostramos 4 razones fundamentales por las que debes mantener tu sitio actualizado:
1. Imagen
Un sitio web no debe ser el reflejo de la empresa en el día de su desarrollo sino en el momento en el que el usuario la visita. Tanto información corporativa como el catálogo de productos y servicios, proyectos, clientes, etc. deben encontrarse al día. Un sitio sin actualizar provoca una sensación de rechazo y desconfianza hacia la marca o empresa, lo que puede repercutir en sus futuras acciones (venta o contacto).
2. Evolución
Es altamente recomendable la publicación periódica de contenidos relacionados con la actividad de la empresa: artículos, noticias, novedades, recomendaciones y consejos, ofertas, promociones, etc. Además de mejorar el posicionamiento en buscadores, muestra la evolución de la empresa y fortalece su imagen. Un sitio con un artículos recientes tiene más posibilidades conseguir conversiones que otro desactualizado.
3. Posicionamiento
Posicionarnos en el buscador por encima de nuestra competencia puede ser clave para conseguir que el usuario se decida por nosotros y ganar un cliente. Debemos estudiar y analizar los términos de búsqueda de nuestro sector y público, y actuar en consecuencia. La optimización SEO inicial es fundamental, pero también un posterior control y seguimiento de cómo evoluciona nuestra posición en el buscador.
4. Seguridad
Todo sitio en internet está expuesto a ataques, lo que debe mantenernos siempre alerta. Al igual que existe una comunidad de hackers, también la hay de desarrolladores que trabajan para mejorar la seguridad web. Por eso, tanto gestor de contenidos como sus módulos deben encontrarse siempre actualizados en su última versión para evitar posibles incidencias que, a la larga, serán más costosas de reparar.
En definitiva, podemos extraer una consecuencia directa de tener un sitio web sin un mantenimiento básico:
Lo que podría haberse convertido en un cliente (puede que recurrente, y posteriormente en una recomendación a otros) se puede quedar en nada.
Ahora, analiza esto de forma global: ¿Cuántos clientes puedes haber perdido por tener el sitio web sin actualizar?